Nearer My God to Thee
A Sermon on John 4:27-30
Originally preached Dec. 17, 1967
Scripture
27¶ And upon this came his disciples, and marvelled that he talked with the woman: yet no man said, What seekest thou? or, Why talkest thou with her? 28The woman then left her waterpot, and went her way into the city, and saith to the men, 29Come, …
Sermon Description
Is communion and fellowship with the Lord possible? How does the Christian gain this experience? In this sermon on John 4:27-30 titled “Nearer My God to Thee,” Dr. Martyn Lloyd-Jones assures the believer that it is possible to encounter God and enjoy fellowship with him. Not only is it possible, it is his desire that the Christian should know him and draw near. The means to do this are given in Scripture: diligently seek the Lord in the Scriptures, partake in the Lord’s Supper to realize his spiritual presence, pray and ask God to reveal himself, and be obedient and responsive to his encouragements. Dr. Lloyd-Jones reminds the listener that now, more than ever, Christians have the time and means to seek the Lord but they must create and fight for this time. They must not allow themselves to be overcome by other responsibilities as if drawing near to God is the lesser priority. Set aside everything else to commune with the Lord and experience his fellowship.
Sermon Breakdown
- The sermon focuses on John 4:27-30 and the story of the Samaritan woman leaving her water pot to tell others about Jesus.
- The main point is that it's possible for us today to have the same experience of fellowship with Jesus that the early Christians had.
- We must believe this fellowship is possible and seek it diligently.
- We should seek Jesus in the Scriptures, in prayer, in the sacraments, and by reading about the experiences of other Christians.
- We must be obedient to Jesus by responding when he draws near to us and by listening when he rebukes us.
- We must resign ourselves completely to Jesus and let him determine how and when he will manifest himself to us.
- We must persistently and consistently seek Jesus through discipline and by making him our priority.
- Although persecution or suffering can help us focus on Jesus, we don't have to wait for that and can pursue him now.
- Jesus is just as ready to manifest himself to us today as he was to the Samaritan woman. Fellowship with him is possible for all believers.
Sermon Q&A
¿Qué enseña Lloyd-Jones sobre experimentar la presencia de Cristo?
¿Cómo explica el Dr. Lloyd-Jones la capacidad del cristiano para experimentar la presencia de Cristo hoy?
Según el Dr. Lloyd-Jones, los cristianos de hoy pueden experimentar la presencia de Cristo tan vívidamente como aquellos que lo conocieron durante Su ministerio terrenal. Él enfatiza que "lo que era posible para las personas cuando Él estaba realmente aquí en los días de su carne... es lo que sigue siendo posible". Advierte contra pensar que somos "desafortunados por vivir en el siglo XX en lugar del primer siglo" o que estamos "de alguna manera siendo privados o que estamos en desventaja". La vida cristiana no es simplemente vivir de recuerdos o enseñanzas sobre alguien que una vez vivió, sino que implica una verdadera comunión y compañerismo espiritual con Cristo.
¿Qué dice Lloyd-Jones sobre la experiencia del Apóstol Pablo con Cristo?
El Dr. Lloyd-Jones señala a Pablo como evidencia de que el conocimiento directo de Cristo no está limitado a aquellos que lo conocieron físicamente. Señala que aunque Pablo "no había sido uno de los discípulos en el tiempo de nuestro Señor aquí en el mundo en la carne", él no era "en ningún sentido inferior a los otros apóstoles" en cuanto a "conocimiento, entendimiento y comunión con el Señor". Lloyd-Jones cita 2 Corintios 5, donde Pablo afirma que "aunque hayamos conocido a Cristo según la carne, ya no le conocemos así", indicando que el conocimiento espiritual de Cristo que tenía Pablo era superior al conocimiento meramente físico.
¿Qué pasos prácticos recomienda Lloyd-Jones para experimentar la presencia de Cristo?
El Dr. Lloyd-Jones describe varios pasos prácticos:
- Creer en la posibilidad de experimentar la presencia de Cristo
- Buscarlo diligentemente en las Escrituras - leer con la intención de encontrarlo
- Participar significativamente en los Sacramentos, especialmente la Comunión
- Orar específicamente por Su manifestación
- Leer biografías de santos que experimentaron la presencia de Cristo
- Ser obediente a Sus impulsos o "atracciones"
- Ser receptivo cuando sientas Su cercanía
- Someterte a Sus reprensiones y corrección
- Resignarte completamente a Su tiempo y manera
- Persistir con disciplina y determinación
¿Cómo describe Lloyd-Jones la experiencia de "acercarse" a Cristo?
Lloyd-Jones describe las "atracciones" de Cristo como momentos en que Él se nos acerca espiritualmente. Estos son tiempos de "ablandamiento de la experiencia, una ternura en tu espíritu". Enfatiza que estos momentos a menudo vienen inesperadamente - "A veces una luz sorprende al cristiano mientras canta". Insta a los creyentes a ser receptivos cuando Cristo parece estar cerca, haciendo referencia a Isaías 55: "Buscad al Señor mientras puede ser hallado... Invocadle mientras está cercano". Cuando sentimos que Cristo se acerca, Lloyd-Jones aconseja: "No importa lo que estés haciendo. Si Él se acerca a ti, deja todo lo demás".
¿Qué advertencia da Lloyd-Jones sobre nuestra respuesta a la presencia de Cristo?
Lloyd-Jones advierte contra ser como la novia en el Cantar de los Cantares 5, que tardó en responder al llamado de su amado y, en consecuencia, lo perdió. Dice: "No hay nada que sea tan insensato además de cualquier otra cosa como dejarlo a un lado". Enfatiza que no debemos estar "demasiado ocupados" cuando Cristo se da a conocer a nosotros. Cuando Cristo se acerca, debemos responder inmediatamente en lugar de decir "atenderé eso más tarde". Lloyd-Jones afirma: "En el momento en que escuches ese llamado, deja todo, abre la puerta, y Él entrará".
¿Cómo contrasta Lloyd-Jones el cristianismo objetivo y subjetivo?
El Dr. Lloyd-Jones señala que a lo largo de la historia de la iglesia ha habido "algún tipo de oscilación" entre enfoques objetivos y subjetivos del cristianismo, con "algunos puramente objetivos, algunos puramente subjetivos". Afirma que "ambos extremos están equivocados" porque "la gloria de este Evangelio es que abarca al hombre entero. No es meramente para el intelecto. También es para las sensibilidades y para los sentimientos". Advierte que "nos hemos acostumbrado tanto a algo puramente objetivo que tendemos a olvidar la dimensión subjetiva" de la fe.
¿Qué enseña Lloyd-Jones sobre la naturaleza democrática de experimentar a Cristo?
Lloyd-Jones enfatiza firmemente que experimentar a Cristo no está limitado a categorías especiales de cristianos. Rechaza la "división muy equivocada y no bíblica" que sugiere que algunas experiencias son "adecuadas para los apóstoles" o "adecuadas para los santos" pero no para los creyentes ordinarios. Afirma firmemente: "El Nuevo Testamento dice que todos estamos llamados a ser santos y que, por lo tanto, todas estas cosas son posibles para todos nosotros". Descarta la idea de que uno necesite "convertirse en monje o monja y salir de la vida" para tener experiencias espirituales profundas, señalando que "personas de todos los tipos y clases han conocido esta experiencia".
The Book of John
Dr. Martyn Lloyd-Jones
Dr. Martyn Lloyd-Jones (1899-1981) was a Welsh evangelical minister who preached and taught in the Reformed tradition. His principal ministry was at Westminster Chapel, in central London, from 1939-1968, where he delivered multi-year expositions on books of the bible such as Romans, Ephesians and the Gospel of John. In addition to the MLJ Trust’s collection of 1,600 of these sermons in audio format, most of these great sermon series are available in book form (including a 14 volume collection of the Romans sermons), as are other series such as "Spiritual Depression", "Studies in the Sermon on the Mount" and "Great Biblical Doctrines". He is considered by many evangelical leaders today to be an authority on biblical truth and the sufficiency of Scripture.